La aparición de secreciones en el ojo del gato puede ser algo habitual y de lo que no deberías preocuparte en exceso siempre que las detectes de manera rápida y no tardes en ponerles solución. ¿Le ha sucedido esto al tuyo recientemente? Desde Fidelidade te contamos las posibles causas y los cuidados que le deberás dar a un gato con ojos llorosos.
Además de los remedios caseros para ojos llorosos en gatos que verás en este post, queremos recomendarte nuestro seguro para perros y gatos. De esta manera, tu pequeño animal de compañía podrá recibir en todo momento la mejor asistencia veterinaria y tú tendrás la tranquilidad de saber que está en buenas manos.
Ahora sí, vamos a ahondar sobre la situación por la que pasan los gatos con ojos llorosos y estornudos, así como a desvelarte rápidas curas que puedes aplicar en tu casa:
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Existen diferentes razones por las que un gato puede tener los ojos llorosos. Por ejemplo, en los felinos callejeros suele ser muy habitual la falta de aseo o un aseo incorrecto. Recordemos que estos animales son muy reacios a mojarse, por lo que su higiene se basa principalmente en el cepillado y los cuidados que se dan a ellos mismos.
Otra de las causas más claras es que el gato tenga alguna infección o enfermedad ocular, que sufra problemas en los conductos lacrimales, que tenga algún tipo de magulladura en el globo ocular o también por alguna alergia.
Podemos determinar que estos últimos casos enumerados pueden detectarse con facilidad, ya que podrás ver claramente las legañas y que al felino le lloran los ojos más de lo común. Es decir, puede suceder en momentos puntuales que presente estos síntomas de manera discreta, pero si se trata de algo recurrente lo más probable es que necesite asistencia veterinaria.
Antes de llevar a tu gato con ojos llorosos a que le atienda un especialista hay una serie de prácticas beneficiosas para su salud y bienestar que puedes aplicar, pero veamos primero en mayor profundidad estas infecciones mencionadas.
Los virus en los ojos de los gatos pueden aparecer con tanta naturalidad como en el caso de los seres humanos y dar lugar a diversas enfermedades. A continuación encontrarás varias de las más comunes, junto con los síntomas que se manifiestan con mayor notoriedad:
La rinotraqueítis felina es una enfermedad vírica que se manifiesta en los gatos, como su propio nombre indica, y que puede causar serios daños en la mucosa nasal del animal afectado. Un gato con ojos llorosos puede estar expuesto a ella, pero también suele ir acompañada de problemas respiratorios.
En esta enfermedad también se presentan abundantes legañas, deshidratación o fiebre como otros de los síntomas más representativos. Los indicios que se manifiestan con mayor claridad siempre son señal de que el animal requiere de atención médica. Aunque sean leves, no dudes en notificarlo para poder estudiar el problema desde su raíz.
La mucosidad, el lagrimeo y las legañas también pueden ser una señal de que un gato con ojos llorosos tiene rinitis felina. Se trata de una inflamación de la mucosa que puede manifestarse tanto en gatos como en perros y llegar a generar incluso obstrucciones y provocar la pérdida del olfato.
La clamidiosis felina es una enfermedad que afecta especialmente a los gatos más pequeños, de menos de 3 meses, y es causada por la bacteria Chlamydophila felis. Habitualmente causa estornudos, secreción nasal, fiebre, pérdida del apetito y que el gato tenga los ojos llorosos. Es una afección molesta, pero que puede ser controlada por medio de vacunas.
La conjuntivitis puede ser otra de las consecuencias posibles si ves que tu gato tiene los ojos llorosos. Hay múltiples tipos, ya que pueden ser bacterianas, parasitarias, infecciosas, alérgicas, causadas por alguna anomalía… pero todas ellas tienen algo en común: producen una inflamación en la conjuntiva de los ojos, esa membrana que actúa como protectora ante diversos agentes externos que puedan lastimar el globo ocular.
Teniendo todo esto en cuenta, vamos a darte unos simples pero efectivos consejos para curar a tu gato con ojos llorosos en casa antes de que sea atendido por un veterinario profesional.
Es importante que siempre dispongas en casa de productos de primera necesidad para el cuidado de tu gato, al igual que los tienes para ti cuando surge alguna emergencia. En este caso, lo recomendable para sanar a un gato con ojos llorosos es el uso de suero fisiológico que podrás aplicar cuidadosamente para eliminar las legañas existentes y aliviar los síntomas.
En caso de que no dispongas de suero, también puedes ayudarte de algodones o gasas estériles humedecidas con agua tibia. Recuerda que debes utilizar una gasa diferente para cada ojo y que esto tan solo te servirá como solución rápida, ya que lo correcto y más seguro es que un veterinario atienda a tu mascota y diagnostique cuál es el problema para poder ofrecerte una solución más efectiva o recomendarte un tratamiento para el felino.
Las infecciones no tratadas a tiempo y con un criterio definido pueden llegar a dar lugar a graves consecuencias. No dejes que esto suceda con tu gato con ojos llorosos y ten todo tipo de garantías en el cuidado de su salud con el seguro de mascotas que ofrecemos en Fidelidade.
Con él tendrás acceso a revisiones periódicas para poder prevenir este tipo de enfermedades que hemos mencionado, posibilidad de incluir su plan de vacunación, pondremos a tu disposición una línea de orientación para que puedas consultar tus dudas con un veterinario, incluir una cobertura de responsabilidad civil y también te ayudaremos a sobrellevar la dura situación que supone perder a estos seres queridos.
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